El año 2020 estuvo marcado por la gestión de la crisis sanitaria derivada del Covid-19, al tiempo que se garantizaba la continuidad de los servicios y se adaptaban todos los procesos de Recursos Humanos al nuevo contexto.
El año 2020 estuvo marcado por la gestión de la crisis sanitaria derivada del Covid-19, al tiempo que se garantizaba la continuidad de los servicios y se adaptaban todos los procesos de Recursos Humanos al nuevo contexto.
Fiel a su compromiso con sus profesionales, desde el inicio de la pandemia Mutua Madrileña priorizó la seguridad de sus empleados a cualquier otra consideración. Para ello, se estableció un completo plan de actuación específico en torno a varios ejes.
Antes de que se decretara el estado de alarma, prácticamente la totalidad de la plantilla empezó a realizar su labor de forma remota desde sus hogares, incluidas todas las personas que desempeñan la parte más crítica de la atención al cliente en los call center.
Mutua contaba ya con un programa de trabajo a distancia previo a la crisis, denominado SOYMóvil. El gran reto fue hacer extensivo el teletrabajo al conjunto de la plantilla, algo que se materializó en tiempo récord.
Esta apuesta por el teletrabajo incluyó también a los trabajadores de los call center externos que dan servicio a la compañía, lo que se gestionó de forma personalizada con cada proveedor, adecuando Mutua sus sistemas para ello.
En paralelo, la compañía diseñó un Plan de Vuelta a la normalidad, de acuerdo con el cual se produciría la reincorporación progresiva de la plantilla a los centros de trabajo, en función de la evolución de la pandemia. Para ello se priorizaría los colectivos de menor riesgo, definidos en base a criterios médicos, y garantizando las máximas medidas de seguridad, tanto personales (prueba de PCR previa, control de temperatura diario, uso obligatorio de mascarilla y pantallas protectoras, entre otras), como en los espacios físicos.
Para minimizar el impacto de la pandemia entre nuestros empleados, la compañía puso en marcha un amplio dispositivo de medidas entre las que destacan las siguientes:
En un entorno marcado por la incertidumbre y el trabajo en remoto, en 2020 la compañía reforzó su apuesta por la comunicación interna, diseñando nuevas iniciativas para impulsar la confianza, la seguridad y motivar a nuestro equipo de profesionales.
Nuestras líneas de actuación perseguían varios objetivos:
Entre las actividades realizadas destacan los encuentros digitales con el equipo directivo, concursos y actividades familiares, boletines especiales de noticias, además de campañas de sensibilización para la prevención de riesgos.
En 2020, tras superar la correspondiente auditoría por parte de AENOR, Mutua Madrileña obtuvo la certificación por su sistema de gestión de Seguridad y Salud bajo la norma ISO 45001:2018, la más exigente a nivel internacional. Un reconocimiento que refleja el firme compromiso de la compañía en este ámbito y que se ha logrado en un año de especial actividad en este campo.
La Comunidad de Madrid, a través de su Fundación Madrid por la Competitividad, nos concedió en 2020 esta certificación por el amplio conjunto de medidas puesto en marcha para prevenir riesgos, cuidar de la salud de los empleados y garantizar la sostenibilidad del negocio.
Mutua fue reconocida en el máximo de categorías posibles: Medidas de Cumplimiento, Medidas de Cumplimiento Extraordinarias y Acción Solidaria, lo que refleja nuestro esfuerzo para buscar soluciones a esta situación sin precedentes.
